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Mostrando entradas de 2014

El tren de la bruja

Jueves por la mañana.  Como cada día, camino del trabajo, enciendo la radio. Escucho en directo al presidente del gobierno en el congreso de los diputados. Se va a abrir un debate sobre nuevas leyes para frenar, combatir, detener, disminuir ... la corrupción. Durante minutos escucho su palabrería hueca, rimbombante, aburrida, artificiosa. Se podría decir exactamente lo mismo con la cuarta parte de palabras, pero entonces no se camuflaría la flagrante falta de contenido de su discurso.  Continúo escuchando. El señor presidente comenta los casos de corrupción que han aparecido dentro de su propio partido, gente en la que confiaba, explica,  y que ha resultado no ser lo que parecía. Dice que ya ha pedido perdón por ello. Nada más. ¿Ya está?. ¿Basta con pedir perdón?. Me dan ganas de ir donde el señor presidente y pegarle un balonazo en todos los morros, o dos, o tres ... y luego pedirle perdón. A ver si le bastaba con eso a él. Aún no se ha enterado que la política no es una religi

Diario Irreverente de la Mañana: El viajar es un placer

Como bien decían los payasos de la tele, el viajar es un placer que nos suele suceder ... ay que recuerdos ... en el auto de papá. Los más viejos del lugar recordarán esa canción infantil, que cierto personaje ha puesto muy de moda en los últimos días. Porque este señor, en su particular homenaje a Miliki y compañía, se ha dedicado al placer de viajar, pero en avión, y con la pasta de papá ... Estado. Dada la humildad del presente medio de comunicación, nos van a permitir ustedes (como están? ... biennnnnnnnnn), que utilicemos nombres ficticios para referirnos a estos hechos, para así preservarnos de posibles querellas y otras lindezas con que este tipo de gente suele dar coletazos una vez han sido pescados. Porque aparte de caradura, les sobra el dinero para contratar buenos abogados, cosa que no podemos permitirnos los demás. Y si encima se nos ponen más y más caras tasas judiciales ... gracias señor ex-ministro de Justicia por ese legado suyo, aunque supongo que no tendrá demasiad

Porca miseria

Hace tiempo que no escribía por estos pagos. Mi vagancia debe ser una de las pocas cosas que se escapan a esta crisis que lo arrasa todo. Maldita. Siguen en plenitud, la crisis ... y mi vagancia. Aún así hay coletazos de la actualidad que se atreven a desafiarla, y me agarran del cuello para sentarme delante de la pantalla a teclear unas cuantas líneas.  Ayer me llegó uno, cuando me enteré de la ya famosa operación púnica. Se me vino una imagen a la mente, así de repente sin más. Una península de tierra en forma de bota que se hunde en el mediterráneo, y una bandera tricolor, roja, blanca y verde. Y tras la imagen me vino el recuerdo de un tiempo nada lejano, cuando en este país nuestro de cada día recibíamos las noticias de lo que acontecía en la tierra de la bota, con sus guerras mafiosas, sus historias de la camorra, y sobre todo la corrupción, que campaba a sus anchas allá hacia donde quiera que se mirase, en niveles que nos parecían absolutamente desproporcionados.  Que lev

El nivel de los políticos

Se podrían escribir millones de líneas acerca del lamentable y vergonzoso nivel de los políticos y de la prensa que tenemos en este país nuestro. Lo cual indica por cierto el lamentable y vergonzoso nivel que tenemos todos nosotros como sociedad, puesto que los políticos no son más que el reflejo de la sociedad en general, y lo mismo sucede con la prensa. Así que debiéramos hacérnoslo mirar, con urgencia. Pero es que ni siquiera hacen falta tantas líneas. Aquí va un ejemplo palmario: Noticia del sábado 20/09/2014 publicada en La Voz de Galicia, acerca de la Carrera de la Mujer que se iba a celebrar el día siguiente.  Noticia de La Voz de Galicia Es increíble tanto sexismo y tanta desfachatez por parte de los organizadores de la prueba y el ayuntamiento que la apoya etc ...  Ahora entren ustedes en la página de la carrera y sólo hace falta mirar la parte superior de la misma:  Carrera de la mujer Pues va a ser que Central Lechera Asturiana patrocina/colabora con este

Pidiendo explicaciones.

Saludos a todos, si es que queda alguien que me lea alguna vez jejeje. Hace seis meses de la última publicación en el blog. Me ha podido la vagancia, lo confieso. El exceso de actividades paralelas en que me embarco tiene su precio y esta vez lo ha pagado el blog. Hasta el día de hoy.  Sucede que a pesar de estar en la distancia, uno siempre mantiene lazos con el lugar donde nació y creció. Hace unas fechas me llegó el enlace a un artículo del periódico gijonés El Comercio. En él se comentaba que recientemente se había producido el despido de un docente del colegio Corazón de María, por razón de su conducta impropia con los alumnos, que si bien no era constitutiva en ningún momento de delito (esto lo remarcaba cuidadosamente), sí que era contraria al ideario de dicho centro educativo, por lo cual, la dirección del mismo había tomado cartas en el asunto para cesarle en su puesto. Y nada más. Ningún detalle más, ningún dato más ... nada. Y bien, ahora me gustaría preguntaros a todos

La violencia de género es mucho más

La noticia de otra mujer muerta a manos de su pareja, actual o anterior, se ha convertido ya, por desgracia, en algo similar al repiqueteo de la lluvia contra los cristales. Es un ruido que está ahí, machacón, repetitivo, interminable ... Y nada más. A fuerza de estar ahí parece que deje de molestar. Nos acostumbramos a él. Lo asumimos. No como algo deseable, pero sí como algo cotidiano y casi inevitable. Y esto es así aunque no queramos. Admitámoslo, y tal vez podamos empezar a ver las cosas de otra manera, desde otra óptica. Porque uno de los grandes defectos de la sociedad de hoy en día es precisamente ese, el punto de vista único y universal desde el que a menudo se analizan las cosas y que suele conducirnos a casi cualquier sitio, menos a la solución de los problemas. La desigualdad entre sexos es uno de los problemas más graves que nos aquejan como sociedad. Es cierto que se ha avanzado mucho, pero también es cierto que estamos todavía más cerca del inicio del camino que del f

La infanta, paradigma de los "ignorantes declarados"

¿Es usted vicepresidenta de esta empresa? Sí. ¿Firmaba usted actas y demás documentos de esta empresa? Sí. ¿Cargaba usted gastos particulares a cuenta de esta empresa? Sí. ¿A qué se dedicaba esta empresa? Lo ignoro. ¿Sabe usted ...? Lo ignoro. No sé. No recuerdo. Ni idea. Así podríamos resumir la declaración ante el juez de la infanta. Y así podríamos resumir las declaraciones de tantos y tantos alcaldes, concejales, políticos, secretarios, cargos de sindicatos, de administraciones, de sociedades generales de autores, de cajas de ahorros, de bancos ... En este país prima la ignorancia. Nadie sabe nada, nadie recuerda nada, nadie se entera de nada. Aquí todo el mundo ostenta un cargo pero nadie se responsabiliza de nada, nadie atiende a los deberes de ese cargo, nadie es consciente de lo que debería ser consciente en el desempeño de su cargo. Y si hay que firmar un papel, pues se firma. Luego ya declararé que no sabía lo que firmaba, y que en realidad me fiaba de lo que me ponían d

El paseillo a los juzgados

Título nobiliario. Sangre real. Sueldo millonario por ser de la realeza. Posición económica más que desahogada. Llega el angelito del arco y de la flecha y con él un angelote rubio, recio y norteño. Deportista de élite. Impoluto historial. Deslumbrante presencia. Un cuento de hadas que termina en boda. El tiempo quita la careta al angelote y resulta ser un diablillo de mucho cuidado que comete desmanes sin fin, para agrandar los ceros en sus cuentas bancarias. Y resulta que su real esposa está directamente involucrada en esas empresas maritales a través de las cuales se cometen todos esos delitos. Y resulta que a la de los ojos vendados y la balanza en la mano, no le queda otra que llamar a la real esposa para que declare y explique su versión de los hechos. ¿Les suena de algo esta película no? Tiene muchos bemoles aguantar todo esto, porque que quien de por sí tiene ya dinero para vivir como doscientas vidas sin dar palo al agua, se rebaje a delinquir para amasar aún mayor fortun