Del día del libro y la lectura. COVIDiario del Jueves 23 de Abril (día 41)

Jueves. Hoy a la noticia no está tanto en las cifras, que dicho sea de paso siguen cumpliendo las previsiones positivas, como en que se empiezan a publicar las medidas concretas para la salida de los niños a la calle a partir del lunes. Poco a poco vamos pasando de los dichos a los hechos.Veremos finalmente como se concretan definitivamente en primer lugar, y en segundo lugar, como se cumplen y que efecto tienen cuando entren en vigor.
Pero hay algo más importante en el día de hoy, y es que estamos en el día del libro. Un día del libro especial debido a la situación excepcional en la que nos encontramos, pero día del libro al fin y al cabo. Y en las condiciones sociales en las que vivimos actualmente, encerrados en casa debido a la cuarentena impuesta, la figura de los libros cobra especial relevancia, más aún de la que ya de por si tiene o debería de tener. Porque no hay mejor compañero para combatir las horas de aburrimiento y monotonía generadas por el confinamiento, que un buen libro. Y como bueno me refiero a aquel que le guste a quien lo lee. Simplemente eso basta. Cada cual tiene sus preferencias y sus gustos y todos son respetables, así que cualquier libro con el que alguien disfrute leyendo es bueno. En estos días en que tenemos restringida la movilidad, en que únicamente salimos de casa lo justo y necesario, los libros son una puerta abierta para escaparnos de la realidad y viajar a mundos reales o imaginarios y participar en mil y un historias por descubrir. Leer es esa actividad que se puede hacer en cualquier sitio y momento, y que nos permite evadirnos de todo cuanto nos rodea, para sumergirnos en el mundo que dibuja y construye cada libro y en las historias que suceden en él. Una de las cualidades del ser humano es la empatía, la capacidad de experimentar sensaciones a través de las historias que una persona conoce (independientemente del medio por el cual las conozca, ya sea el boca a boca, el cine, la radio, un libro), la capacidad de sentir esas historias prácticamente como si hubieran sido vividas en primera persona. Y es precisamente por esa cualidad, por la que los libros cobran una importancia inmensa para nosotros, porque nos permiten vivir a través de la lectura, situaciones que sería imposible que nos sucedan en la vida real, sino todas, al menos una gran mayoría de ellas.
Y en esas historias además, se dibujan realidades de otros lugares, de otras gentes,  que conforme las leemos las vamos descubriendo y aprendiendo, y van enriqueciendo nuestro conocimiento.
Y todo esto sin movernos de nuestra confortable butaca de lectura. ¿Hay magia más barata y potente que la lectura de un libro? Creo que no. Si son lectores habituales coincidirán a buen seguro conmigo, y si no lo son, por favor, háganme caso, denle una oportunidad a los libros, prueben a leer habitualmente. No se arrepentirán, de eso estoy seguro.
Buenas noches.

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